martes, marzo 15, 2011

martes, 15 de marzo del 2011

Carta nº3 desde que empiezo a olvidarte:

Hola. Ya estoy bastante mejor, estar acompañada me ha ayudado mucho, cuando estoy con gente ni me acuerdo de cómo me ha dejado de latir el corazón. No ha dejado de llover en toda la mañana, y por si te interesa, hace dos días que no hablo con mamá. Supongo que te imaginarás a que se debe, ya que siempre es por lo mismo. Y me he dado cuenta de que lo que me jode no es lo que mi madre ha echo, si no el echo de que tú no estés ahí para decirme: "Si te toca la mato", y supongo que lo estoy pagando con ella sin ser para tanto. Llevo unos días llendo andando al instituto, estarás orgulloso jaja, y el otro día inteligentemente borré sin querer todas las canciones de mi iPod. Ahora solo tengo las canciones descargadas que tenía guardadas de este año. Joder, este año. Llevo contadas 364 canciones que me recuerdan a algo relacionado contigo. Todo tiene algo relacionado contigo. Todo lo que falta. Te has llevado las sonrisas, el buen humor, las ganas de sentir.. Todo. Por llevarte te has llevado hasta los días soleados. Y empiezo a cansarme de aquellos que dicen "Olvídale, es gilipollas". Coño, ¿No ves que no puedo? Es lo mejor que ha entrado en mi vida desde hace mucho tiempo. Y lo que no me explico es cómo la gente no puede verlo.. Tengo setecientas noventaiseis mil doscientas cincuenta y tres razones por las que quererte. Mira, te quiero por esas dos arruguitas que se te forman en el cuello cuando giras la cabeza 236º, por como achinas los ojos cuando te ries, por sonreír con la boca cerrada. Te quiero por las 37 pecas que tienes en los hombros, por tener siempre las uñas comidas y por tus interminables pestañas. Por tu oscuro pelo, por como te picas cuando te lo cuando te lo toco y como te picas cuando dejo de hacerlo. Te quiero por ser tan listo, y por jugar a hacernos creer que no lo eres. Te quiero por usar esa colonia tan fuerte, y que ahora me guste tanto que se la haya regalado a mi padre por navidad. Te quiero por ser tan capullo.  Te quiero por no me has cegado, porque sé bien lo que haces bien y en que te equivocas, y eso es lo mejor. ¿Cómo no podeis ver lo maravilloso que le hacen todos sus defectos? Si eso es lo realmente alucinante de querer..




que foto tan jodidamente típica..

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