Miércoles, 23 de Junio del 2010

Vosotros sois quienes alegráis los días más tristes. Porque, ¿Sabéis? Son nada más y nada menos que 11 años los que llevo metida con vosotros en una misma aula 35 horas semanales durante 8 meses al año. No voy a decir que todos nos llevemos bien, porque estaría mintiendo, nos llevamos como perros y gatos, siempre estamos discutiendo, nos criticamos a las espaldas e incluso nos reímos los unos de otros, y hay días en los que no nos soportamos. No somos la mejor clase, ni la más unida, ni la más eficiente, tampoco voy a decir que me haya sentido siempre orgullosa de la gente que había en ella, pero sí puedo decir que siempre que alguien de verdad lo ha necesitado, todos hemos estado ahí.  Nos conocemos demasiado bien, más de lo que creemos, y sabemos perfectamente quién miente y quien no, sabemos como tratarnos. Somos muy diferentes, cualquiera diría que tenemos todos la misma edad, pero, no hay mayor afecto que el roce. Podría compararse como una gran familia. Pepe ha sido como un padre durante este año, por lo menos para mi, ha sabido escucharnos y dar la cara por nosotros siempre, incluso cuándo nadie creía en nosotros él nos apoyó, le debemos mucho. Más de una vez se las ha tenido que llevar él por defendernos, y superando ya cualquier tipo de cariño, le quiero, y estaría dispuesta a todo por que él fuera nuestro tutor durante toda la secundaria. Y todos vosotros habéis sido como mis hermanos. Como en cada familia, hay hermanos con los que te llevas bien, y otros a los que por más que no les soportes, al fin y al cabo les quieres. Después de todo, sois parte de mi vida. Cada uno a su medida, sí, pero lo sois. Nos espera un año duro, más de uno se nos quedará por el camino, nada es como antes, y el año que viene será difícil para todos, pero no me cabe duda de que lo superaremos. Me cabe destacar a siete personas, mis cinco, como no, ellas lo saben todo, pese a que me cueste tanto reconocerlo, son mi vida, y ellas lo saben, hacéis que cada año sea mejor al pasado, y adoro la idea de estar creciendo a vuestro lado. Nicolás Viqueira, eres un pesado y un gritón, totalmente intransigible, pero tienes las ideas claras, nadie cambia tu forma de pensar, y eso dice mucho de ti, me ha costado años darme cuenta de tus virtudes, sí, pero ahora las veo, y nadie me hace reír como tú aunque aveces no me hagas gracia. Alberto Llorca, lo más cabezón que conozco, siempre quieres tener la razón, un histérico que por todo se enciende. Después de esto cualquiera diría que te quiero, pero para sorpresa de todo el que lee, sí, le quiero. Daniel Pumar, has demostrado ser la persona más madura que conozco a la vez que fuerte, has sabido aguantar todos los golpes que la vida últimamente te está dando, y aún así aceptarlos con humor, un poco capullo puede, pero al fin y al cabo lo haces para sacar una sonrisa a aquellos a quienes quieres, a ti te conozco hace más tiempo que a nadie, y ahora, al igual que todos, eres parte de mi vida. Para todos aquellos a quienes acabo de nombrar, gracias, lleváis 11 años quitándole peso a los momentos difíciles, y aumentando hasta un máximo los felices. Gracias.